En un juicio dice el fiscal:
Miren al acusado, su mirada torva, su frennte estrecha, sus ojos hundidos, su apariencia siniestra.
Y el acusado interrumpe:
Pero bueno, ¿me van a juzgar por asesino o por feo?
Hoy había 2 visitantes (3 clics a subpáginas) ¡Aquí en esta página!